Te diría que no intentes arreglar lo que no está roto. No nos hagamos cargo de cosas que no son nuestras sino problemitas de otros, heredados vaya uno a saber de qué traumas infantiles o adolescentes. Herir susceptibilidades es tan fácil y tan masculino que te diría que iría por la vida sin hacerme demasiado drama por cómo puede haber ofendido a tal o cual un comentario, frase o situación, si no fuera porque en el fondo el cariño siempre gana y uno termina preocupándose y cuidándose y dejando de ser lo que uno es simplemente para no hacerlo.
