lunes, 22 de abril de 2013

Caminante no hay camino

Si siempre creí que la única forma de "triunfar en la vida" era ser auténtico, fiel a uno mismo, creer en las propias capacidades y dar lo mejor de uno para uno y no para los demás... ¿en qué momento decidí dejar de hacerlo?

De a ratos, me miro a mi mismo y me doy cuenta de que soy un quejoso, de que no siempre puedo ver el lado copado de las cosas, de que no sigo mis propias reglas. Y me da bronca porque siento que no estoy siendo yo mismo. Me da bronca porque me dejo llevar por lo choto de la vida y no por las cosas buenas que me pasan, constantemente.

Tengo un Dios que me ama y que elijo todos los días, una familia increíble, amigos de otro mundo, gente que me quiere y me aprecia de verdad. Tengo un laburo re copado, un sueldo que me alcanza y sobra y tiempo para explorar mis necesidades personales.

Y a pesar de eso, por momentos, me siento mal. Siento que me faltan muchas cosas, no materiales sino de otro tipo. Siento que no estoy dando el 100% de mi, en muchos sentidos. Siento que no soy auténtico. Y no me gusta.

Quiero cambiar lo que me hace mal, dejar de lado lo que me lastima, y empezar a hacerme cargo de mi propia vida, con las consecuencias que eso traiga.


Caminante no hay camino

Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.

Antonio Machado