sábado, 24 de agosto de 2013

No hay noticias


En otro momento habría respondido "la música", un lugar común y más que entendible. Todos, en mayor o menor medida, escuchamos música, cerramos los ojos y nos dejamos llevar por esas notas. Hoy en día la inspiración es algo que no me acompaña mientras que la música sigue ahí, donde estuvo siempre. Algo falla entonces.
Escribir mis tonterías siempre me pareció una manera de contar mi realidad. No es que haya perdido esa visión, lo que me falta es realidad. No me pasan muchas cosas -por no decir que no me pasa nada de nada- y, por ende, no tengo nada que contar. Si hubiera un noticiero de mi vida, el titular en los útlimos meses sería "No hay noticias". Tendría el buen gusto y criterio de no usar notas de relleno. Sería honesto: "No pasa nada así que hagan zapping y vuelvan en un año o dos". Aprendan, canales con 24 horas de noticias.
Tanto tiempo atribuyéndole a la música la inspiración cuando eran la cotidianidad, el maltrato y los gestos de afecto los que me incitaban a escribir. Era una manera de no olvidar esas situaciones y mi dramática visión. Ya lo conté en otra entrada que no estoy acá, estoy en otro lado y la realidad me pasa por un costado. Eso explica mi silencio.
Perdoname, realidad, volvé, no te fajo más.